Ya se habrán acabado los ensayos, los pasos estarán en los Templos y los retranqueos realizados a la espera del día señalado.
Otra vez, volveré a los nervios de mi niñez y casi no pegaré ojo deseoso de recibir a nuestra Semana Santa.
Con esta entrada quiero despedirme este año de la Cuaresma y saludar de nuevo a una Nueva, y Dios quiera, que soleada Semana Santa.