La tarde del Domingo de Ramos, se presentaba metida en agua, y parecía que este año el Señor de la Cena y la Virgen de la Paz iban a tener que esperar al año próximo para realizar su anual Estación de Penitencia, pero tras una espera de casi dos horas, la Hermandad tuvo la valiente y arriesgada decisión de poner a la Cruz de Guía en la calle.
Al principio, un pequeño aguacero hizo pensar que no podría ser, pero al final la lluvia remitió y la Hermandad de la Cena pudo hacer su recorrido al completo.
Otro año más, Judas volvió a vender a Jesús por 30 monedas de plata y calles de Linares se conmovieron con el Señor de la Cena y el andar característico de la Sra. de la Paz.
Terminaba un Domingo de Ramos con las dos hermandades del día realizando Estación de Penitencia y dando lugar a un nuevo LUNES SANTO de Oración y Gracia.